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El emocionante mensaje de Horacio Zeballos tras llegar a la cima del mundo

El tenista argentino llegó a lo más alto del escalafón mundial de dobles junto con su compañero español Marcel Granollers y expresó sus sensaciones en una conmovedora reflexión.

Por Redacción EG ·

02 de mayo de 2024

HORACIO ZEBALLOS es el claro ejemplo de que con tenacidad y disciplina, además de capacidad, todo se logra y que nunca es tarde aunque se tengan 39 años para celebrar con enorme emoción la llegada a la cumbre del tenis.

Madrid fue el escenario testigo del histórico hecho de haberse convertido, junto con su compañero español Marcel Granollers, en la pareja número uno del mundo en el ranking de dobles, algo nunca ocurrido hasta ahora en la Argentina. Fue al pasar a la semifinal de dicho Masters 1000 con la victoria sobre Nys/Zielinski por 4-6, 6-2 y 16-4 tras una gran volea del marplatense que dio rienda suelta a la euforia.

En su cuenta de Instagram, el tenista nacional publicó un sentido mensaje en el que su primera reacción tiene que ver con lo que le parecía sólo un sueño: "¡Qué locura, no me despierten!". Pero luego le da lugar a la reflexión y al agradecimiento; a la visión en perspectiva de un camino largo y sinuoso en el que jamás bajó los brazos y que al final tuvo su merecido premio.

Llegar a la cima del ranking significa sólo "la punta del iceberg", pero fueron décadas de denodado sacrificio y que tuvieron mojones especiales: "Hace 35 años cuando agarraba mi primera raqueta, hace 25 años cuando bajo frías mañanas de invierno en el Edison hacíamos 120 saques por día con mi viejo y mi vieja juntando las pelotas; hace 16 años cuando el destino me puso en frente a mi entrenador Ale y su equipo. Hace 14 años cuando empecé a formar la hermosa familia con mi mujer que gracias a Dios fue testigo hoy de lo conseguido".

 

Más allá de los buenos y malos momentos, Zeballos señala que "todo es parte de un proceso para hacernos mejores en lo que somos. Lo único que podemos controlar es nuestro pensamiento y lo que podemos hacer ante la adversidad. Lo demás llegará solo".

Casi en el cierre hubo lugar para una confesión: "Estos últimos días no saben lo que tuvimos que luchar con las presiones. El saber que estaba solamente a un partido de lograr el objetivo que tanto soñé. Cientos de imágenes cruzándose por la cabeza... qué lindo. ¡No lo puedo creer!".

"Ahora, a seguir. A no parar de soñar y siempre dejar todo, todo, todo en cada día. Que eso en definitiva es lo que me da paz. ¡Gracias a todos! ¡Vamos!", concluyó.